sábado, 29 de marzo de 2014

337. Notas

Lo llevaba todo apuntado
en la lista de la compra:
una cita
un teléfono
un deseo
un suspiro.

La perdí.
Y ahora





quién compartirá mis secretos 

No lo sé.
Un secreto no se descubre así de fácil. Pienso.

miércoles, 19 de marzo de 2014

336. Por mi madre

Cuando mi media naranja se apuntó a la presentación del libro, le dije: el que avisa no es traidor, te puedes aburrir y yo me quedo hasta el final porque a mí me encanta que me dediquen el libro, “un libro de una autora que me gusta como escribe, que la voy a escuchar por vez primera, y que el libro que presenta, cuando yo lo abra por la primera página, estará dedicado a mí”. En eso pensaba.
Pues vino, le echó valor, no vio el derbi Sevilla-Betis y vino, nos fuimos andando hasta la calle Regina, y cuando vi el lugar de la presentación, “La mercería”, me dije: es que no podía ser de otra manera, es que hace juego con mi blog “El costurero”. Lo encontré un lugar nuevo y viejo a la vez, como a mí me gusta, como la vida ¿o no vivimos todos los días con esta dualidad?
A lo que iba, que si sigo así no hablaré de lo que me interesa: el libro en cuestión, pero antes diré que, aunque me preguntó por el camino qué libro era, no le dije el título hasta que estuvimos sentados con la autora enfrente.
Por mis muertos


Hay mucha emoción en este libro de Flavia Company, pero no tristeza. Es un libro, yo diría, que optimista, como parece ser la autora, y es un libro vivido y trabajado porque sus palabras destilan vida y sabiduría, la mismas que se traslucían al hablarnos en su presentación. Ya se dijo en ella que se lee de un tirón, y a mí me pasó, no quise dejar nada para otro día porque el libro es mío y puedo volver a él siempre que quiera. De hecho, de un buen libro se disfruta más en su relectura porque surgen detalles nuevos que, imbuidos por la novedad, no se aprecian en la primera.
La pregunta que surge en algunas lecturas: ¿qué es realidad y qué ficción? Son respuestas que encontramos en este libro de cuentos. No voy a extenderme explicando de qué van, ni poniendo algún trozo de un cuento. Los libros forman un todo, como éste, y a quien le guste pensar sobre lo que lee, le gustará, lo demás pueden encontrarlo en su blog. Lo que sí espero es haber transmitido la sensación producida.
Y, porque, a pesar del título, es más un brindis a la vida, brindo “Por los muertos” de Flavia; por mi madre, por mi Manué, mi media naranja, que me dijo en el camino de vuelta que le había gustado, que era una mujer de valía, y por eso me acordé de mi madre, que siempre me decía sobre alguien que ella admiraba: “es que vale mucho”.

sábado, 15 de marzo de 2014

335. De turismo

Hace días visitando otra provincia de mi región, Andalucía, nos encontramos con este anuncio en la pared de un edificio.

Juzguen ustedes.

Como no voy a enumerar todo lo que tiene mi ciudad, y, como seguro que quien la visita la ve con ojos distintos, lo que sí os voy a mostrar es la última mirada, la de Virginia, que me ha enseñado algún que otro detalle que desconocía. 

Seguro disfrutaréis, no solo con este post: Sevilla literaria, sino con todo lo que su blog encierra.

domingo, 9 de marzo de 2014

334. Avanzar

Creemos que avanzamos,
mentalmente corremos.

Creemos que avanzamos, 
pero no.

Si nos paramos
encontramos,
de nuevo, 
un precipicio.